jueves, 22 de julio de 2010

Malaga Ruje y Campamento en Mallorca

Durante el mes de julio hemos tenido la oportunidad de colaborar en varios eventos relacionados con jóvenes. El sábado 10 nos desplazamos a Antequera para compartir en la última reunión del curso que organiza Malaga Ruje.

Disfrutamos de un tiempo de música y comunión con cristianos de esa provincia así como de otros puntos de la región y compartimos con ellos acerca de "la muerte como motor de la vida": encontrar la vida que Jesús nos ofrece en el proceso de morir a nosotros mismos.

Nos alegró saludar a personas que hacía tiempo que no veíamos y poder conocer  a otros. También nos alegró que nuestra amiga Elena (compañera de trabajo de Sylvia) quisiera acompañarnos y compartir sus impresiones con nosotros.


El lunes 12 tomamos el avión rumbo a Mallorca con el fin de colaborar con un campamento de jóvenes que organizaba la Iglesia Bautista Reformada de Palma. Aprovechamos unos días para pasar tiempo con nuestros amigos David, Ruth y la pequeña Hanna así como para visitar a los familiares que tenemos en la Isla tanto en el norte como en el sur antes de disponernos a compartir en el campa. Concretamente en un recinto en zona rural de Inca.


El lema del camento fue Re-Construcción, y a través de charlas y dinámicas grupales compartimos acerca de conceptos como Pecado, Salvación, Espiritualidad, Discipulado y Misión. Realmente adaptamos parte del material propuesto en la Escuela Vivencial de Costa Rica y la Consulta de Barcelona a los adolescentes y jóvenes con el fin de que ellos pudieran evaluar la vida cristiana en el S.XXI  animándolos a convertirse en colaboradores de Dios para restaurar un mundo roto a la vez que que permitimos que restaure nuestras vidas. Para ello usamos charlas, dinámicas de grupos, y manualidades creativas.


Tuvimos la oportunidad de cambiar impresiones con los líderes de jóvenes de la zona y compartir experiencias en medio de un agradable diálogo y una buena acogida. Sentimos que hemos fortalecido lazos de amistad con cristianos de la isla y agradecemos la hospitalidad y el cariño que nos han mostrado durante nuestro tiempo entre ellos.

Regresamos a casa un día más tarde de lo previsto debido a los retrasos y cancelaciones provocados por la ausencia de los controladores aéreos. No obstante tuvimos la oportunidad de convivir y ayudar a los viajeros del vuelo durante los desplazamientos a hoteles y aeropuerto, ya que había madres que viajaban solas con hijos pequeños y equipajes. ¡Qué facilmente surgen situaciones para poner en práctica lo enseñado!