sábado, 13 de diciembre de 2014

SE AMPLIA NUESTRO MINISTERIO

Un Embarazo Con Respuestas de Oraciones

Noviembre ha sido un mes muy especial ya que el día 18 Lana nació a las 23:05 de la noche. Como alguno sabéis, el embarazo de Lana no ha sido nada fácil; Sylvia ha enfrentado largos periodos con anemia que le debilitaban mucho, tuvimos el susto de algunas pruebas que nos anunciaban posibilidad de que Lana viniera con problemas, también hubo desajustes en los niveles de azúcar de Sylvia que nos llevaron a pruebas para comprobar si estaba padeciendo una diabetes... sin embargo, todo se fue descartando y gracias a Dios unos días antes del nacimiento de Lana nos anunciaban que los niveles de hierro de Sylvia eran formidables e iba bien preparada para el parto. Solo podíamos dar gracias a Dios por responder nuestras oraciones.

Un Parto Con Jesús En EL Paritorio

El día 7 de noviembre Sylvia me llamó tras salir del trabajo para decirme que llevaba demasiado tiempo con fuertes contracciones, sin embargo, a pesar de dejar a mi querido amigo Ted de Puertas Abiertas con un café y un te en la mano en un bar de Alcalá de Guadaira, todo fue una falsa alarma y Lana se hizo demorar hasta casi la semana 42. El día 18 de Noviembre decidieron estimular levemente el parto y Sylvia estuvo como una verdadera campeona enfrentando los duros y a la vez hermosos momentos de dar a luz a una hija preciosa. Nuestra hermana en la fe Carmen Biscocho tuvo una visión con nuestro parto y veía a Jesús en el paritorio, y la verdad es que su visión nos trajo ánimo y se hizo realidad: Lana nació perfectamente sana y los profesionales fueron muy respetuosos y cercanos en todo momento. Nada más salir, con su cordón umbilical aun sin cortar, Lana fue puesta en el pecho de su madre y allí tuvimos una maravillosa conexión con nuestra nueva hija entre lágrimas. No salió del paritorio sin empezar a mamar, lo cual era uno de nuestros deseos. 

Nuestro Enfoque Ministerial

Nos enfrentamos a una nueva etapa familiar con mucha emoción. Dios está usando a Keyla y Lana
para enseñarnos a ser menos egoistas, y mostrarnos el gozo y la paz que se encuentra en el cuidado de los más necesitados. Keyla está enfrentando el contraste entre la felicidad que le produce contemplar y tocar a su hermanita y la tristeza de no tener toda la atención con la que contaba. En el último año, Dios nos ha mostrado el valor y la importancia de nuestras emociones en el discipulado, por eso estamos aprendiendo a no tapar e ignorar estas emociones en nuestra hija mayor, sino ayudarla a expresarlas en un ambiente donde se puede sentir segura, respetada y amada aun cuando rompe en rabietas y no solo cuando acaricia sonriendo a su hermanita bebé. Como padres, nos toca ser los más maduros y acompañar a los que están madurando y ahora somos más conscientes de nuestras limitaciones, nuestras heridas y nuestra necesidad de la gracia divina que en estos momentos se hace tan necesaria en nuestras vidas. Dios es increíble y sus planes son perfectos. Entendemos mejor el valor de depender de él y contar con la comunidad cristiana para seguir creciendo espiritualmente. 

Como sabéis lo que nos seguís en el blog, entendemos el ministerio como un estilo de vida a tiempo completo que se expresa en el contexto de lo cotidiano más que en programas y eventos concretos. Trabajamos y soñamos con comunidades cristianas donde seamos animados, acompañados y preparados para el ministerio más necesario e influyente en el mundo, es por ello que damos gracias a Dios por el ministerio de acompañar física, emocional y espiritualmente a nuestras hijas. Agradecemos que ores por el ministerio que desarrollamos y deseamos que muchos descubran el ministerio más importante.



Las peques con su super mami



Keyla y Lana

Lana Gómez Santoro


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